Luego de que el Gobierno eliminara ayer por decreto los fines de semana puente y reorganizara los feriados, llegaron las repercusiones. Desde el sector turísticos hubo respuestas diversas. En la Costa, algunos operadores ya muestras cierto malestar por la pérdida de las escapadas de 4 días (ahora sólo queda la de Carnaval), por el movimiento que se generaba en esas épocas.
“El fin de semana largo de Carnaval está prácticamente vendido; al veraneante de febrero se le va a sumar el que pueda tomarse esos días, va a estar bueno”, dice José Pablo de León, presidente de la Asociación empresaria Hotelera y Gastronómica de Pinamar. Administra un hotel y una hostería en Valeria del Mar, y es dueño de Tante, uno de los restoranes más tradicionales de Pinamar. Desde esa posición, reflexiona sobre el impacto que tendrá el nuevo calendario de feriados en el turismo: “Un buen fin de semana largo te puede hacer lograr la facturación de todo un mes en invierno; esto indudablemente va a repercutir porque, al tener fines de semana de tres y no de cuatro días, tenés un día menos de venta”.
Alberto Salvemini, que también forma parte de la comisión directiva de la cámara empresaria y que encabeza un hotel y un restorán, es menos optimista: “El fin de semana de carnaval es parte de la temporada de verano; nosotros aspiramos a estar llenos durante todo enero y febrero, así que no nos hace la diferencia. En cambio, un feriado al mes hace que las economías regionales que viven del turismo se revitalicen”.
Salvemini, que estima que el 20% de su facturación anual proviene de los turistas que se acercan a Pinamar durante los fines de semana largos, sostiene: “Creo que es una medida desacertada y que, en vez de generar empleo, va a lograr todo lo contrario. Los fines de semana de cuatro días de noviembre y diciembre esto estuvo repleto, y se desalienta que eso vuelva a pasar”.
“Argentina es uno de los países con más cantidad de feriados, pero está en el tercio de países con menos días de vacaciones; tendríamos que abrir esa discusión, pero mientras tanto vamos a tener que trabajar para que venga gente todo el año”, dice a Clarín Martín Yeza, intendente de Pinamar. Consultado sobre el impacto que pueda tener el nuevo calendario para la industria turística en el corto plazo, sostiene: “Para hoteleros y gastronómicos es más pesada la presión tributaria que el calendario; habría que poner en agenda la liberación de esa presión tributaria”.