La planificación de vacaciones del 68% de los argentinos se vio afectada por los cambios que vivió la economía, de acuerdo con el estudio “Turismo en tiempo de crisis”, realizado por las empresas de investigación Kantar Millward Brown y Kantar TNS.
Según el reporte, el 93% de los argentinos declara haber reducido o dejado alguna categoría de consumo/gasto ante la situación económica y la fuerte suba del dólar.
No dejar de viajar
Por otro lado, el estudio señala que el 80% aseguró haber hecho ajustes para hacer más eficiente el gasto, de manera de no dejar de viajar, adoptando medidas como: viajar menos que lo previsto (37%), elegir un destino más barato (25%), contratar opciones de vuelos/hospedajes más económicos (21%) u optar por métodos de pago más flexibles (12%).
La financiación, tal como señalan muchos operadores, también se ha vuelto clave a la hora de decidir hacer determinado viaje.
Teniendo en cuenta el fuerte vuelco hacia el turismo interno que se dará este verano, desde hace meses públicos y privados de destinos turísticos clave vienen reuniéndose para evitar que los precios de vacacionar en la Argentina se torne también inaccesible.
Es por eso que, por ejemplo, en la Costa Atlántica de la provincia de Buenos Aires, se acordó que no hubiera aumentos superiores al 30 por ciento.
El precio promedio de un departamento de dos ambientes para 4 a 5 personas en Mar del Plata cuesta $ 17.500 la primera quincena de enero. En Villa Gesell, un departamento de 3 ambientes con lavadero y cocina, cerca de la playa cuesta $ 24.000 en la segunda quincena de enero y las dos primeras semanas de febrero.
¿Cómo están los precios en Brasil? Un alquiler promedio en Camboriú para una familia tipo (2 adultos, 2 menores), desde 350 reales (US$ 95). Y el traslado a este balneario desde el aeropuerto de Florianópolis hasta 4 personas, desde 270 reales (US$ 72).