Se removieron arboles, se quitó tierra y plantas. Se modificó parte del pinar histórico para la implementación de una obra diseñada por el arquitecto Galli que funcione como sumideros y evitar así la inundación de calles.
El lugar donde se hizo y las consecuencias que trajo generó polémica y un arduo debate comunitario. El accionar judicial del por entonces concejal Atilio Roncoroni, hizo que el Juzgado Contencioso Administrativo de Dolores le impida al polémico funcionario que continué realizando este tipo de pozos en ese sector sin cumplir con una serie de requisitos.
Hoy, tiempo después, "la obra" del arquitecto Galli se encuentra abandonada. No solo no se avanzó generando más "sumideros", sino que no se ha mantenido los realizados, ni siquiera garantizando los mínimos niveles de Seguridad e Higiene, algo que -obviamente- el juez no prohíbe en su fallo donde aplica la medida cautelar.
En la mañana de hoy, la concejal de Cambiemos, Eugenia Grinspun, se refirió al tema en declaraciones a MinutoG Radio.