La estadía promedio fue de 2,3 noches (un 15% superior a 2024). Este incremento se explica porque el año pasado el fin de semana tuvo sólo tres días.
El gasto promedio diario por turista fue de $ 91.317, un 3,7% menor en términos reales a 2024, reflejando un comportamiento más austero, pero sosteniendo el consumo básico en gastronomía, alojamiento y transporte.
En total, los turistas desembolsaron $ 355.789 millones el fin de semana, lo que implica un aumento del 34% real frente a los $ 196.233 millones gastados en 2024.
Consideraciones generales
1) Provincia de Buenos Aires. El fin de semana largo dejó resultados positivos para el turismo bonaerense, impulsado por el clima favorable, la diversidad de destinos y una agenda cargada de actividades culturales, deportivas y gastronómicas. En la Costa Atlántica, Mar del Plata vivió uno de los fines de semana de mayor movimiento del año: la ocupación hotelera superó el 75%, con un intenso arribo de turistas desde el jueves, un flujo de hasta 2.500 autos por hora en la Autovía 2 y más de 2.100 vehículos por hora en la Ruta 11. El clima acompañó con días soleados y temperaturas en ascenso, lo que fortaleció la llegada a playas, parques y paseos costeros. El movimiento también se reflejó en la Terminal Ferroautomotora, donde hubo más de 50 servicios adicionales de micros, además de trenes completos. En la costa norte bonaerense, Pinamar registró un 66,7% de ocupación promedio, según datos oficiales difundidos por el municipio, consolidándose como uno de los destinos más elegidos por jóvenes y familias para escapadas de primavera. También se destacaron Cariló, Mar de las Pampas, Villa Gesell, Necochea y San Bernardo, entre otros. En la ciudad de La Plata, la ocupación promedió el 80% entre sábado y domingo, acompañada por los festejos del aniversario de la ciudad, con eventos artísticos masivos en Plaza Moreno y las propuestas de la Semana de la Música, que convocaron a miles de asistentes. En Chascomús, las reservas hoteleras alcanzaron el 95%, con una estadía promedio de tres noches, dinamizada por una nutrida programación que incluyó el Festival Arte Emprende, el tradicional Festival Loy Krathong con la bendición de las aguas por la comunidad tailandesa-laosiana, visitas guiadas dramatizadas, la final del Campeonato Provincial de Pampero y la 17ª edición del Domingo Santiagueño. En el corredor serrano, Tandil tuvo una altísima demanda, destacándose por la búsqueda de “paz total”. Hubo fuerte ocupación en apart-hoteles y alojamientos céntricos, muchos de ellos reservados con meses de anticipación. Las familias disfrutaron de atractivos como El Centinela, la aerosilla, cabalgatas, bicicletas, spas, ferias de artesanos, el Cristo, el lago y los barquitos a pedal, además de recorridas gastronómicas por bodegones y parrillas tradicionales. En el Delta y norte bonaerense, Tigre recibió un flujo constante de excursionistas. Además, la provincia ofreció un calendario excepcional de fiestas populares y celebraciones locales que traccionaron visitantes en todo el territorio. Entre los eventos más convocantes se destacaron la Fiesta Provincial de la Galleta en Rafael Obligado (Rojas), con espectáculos, desfiles y food trucks; la Fiesta de la Vaquillona Asada con Cuero en Germaniense (General Pinto); la Fiesta del Inmigrante en Marcos Paz; la Fiesta del Camino Real en Villa Ruiz (San Andrés de Giles); la Fiesta de la Cerveza en Brandsen; la Fiesta del Mate y la Amistad en Achupallas (Alberti); la Fiesta del Puchero en 25 de Mayo, con concurso gastronómico y espectáculos; la Fiesta Tradicionalista O’Brien en Bragado, y numerosos encuentros culturales, deportivos y gastronómicos en San Pedro, Puan, Olavarría, General Rodríguez, Saavedra, Ayacucho, Maipú y otros municipios que desplegaron una agenda amplia y accesible para residentes y turistas.
