Los principales centros turísticos del país se encontraban desiertos tras el aislamiento social, preventivo y obligatorio dictado por el presidente Alberto Fernández, dado que las medidas para frenar el avance de la pandemia del coronavirus fueron altamente acatadas por la población.
De acuerdo a un relevamiento realizado por las distintas corresponsalías de Télam el panorama era similar en todo el país con calles vacías, poco transporte y comercios y bares cerrados.
El Municipio de la Costa estaba completamente vacío sin circulación de autos turistas o pobladores locales al igual que Pinamar y Villa Gesell que cerraron sus ingresos tras registrarse episodios de violencia entre residentes locales y visitantes que no querían acatar la orden presidencial.