A partir de las 10 de la mañana los detenidos ya llegaron al lugar, a partir de la orden que brindó el Servicio Penitenciario Bonaerense (SPB) de que lleguen al lugar una hora antes del comienzo de la audiencia.
La defensa de los detenidos que encabeza Hugo Tomei tendrá 30 minutos para exponer las razones y argumentos para conseguir su libertad y dar marcha atrás con el fallo que los condenó a penas que van desde la prisión perpetua a los 15 años. El mismo tiempo tendrán los Fernando Burlando y Fabián y Facundo Améndola, representantes legales de los padres de la víctima, Graciela Sosa y Silvino Báez, y la fiscal ante el tribunal, María Laura D'Gregorio.
El objetivo de Tomei será el mismo que durante todo el proceso en el cual sus detenidos fueron juzgados: cambiar la carátula a homicidio en riña y lograr una pena mucho menor que la que obtuvieron bajo la figura de homicidio doblemente calificado, en concurso ideal con “lesiones leves".
Los ejes a los que apuntará el letrado de los condenados será el del cuestionamiento de la forma en la que se detuvo a los rugbiers, sólo unas horas después del crimen, mientras que también cuestionará los procedimientos a partir de los cuales fueron detenidos en aquella oportunidad, tanto lo que se refiere a las indagatorias como a los allanamientos realizados.
Hace dos semanas el representante legal se reunió con los detenidos para coachearlos para esta oportunidad, en la cual muchos de ellos declararán ante los magistrados. Inclusive se sabe que la ausencia de la prensa en la audiencia fue un pedido formal y preciso del abogado.