A tres meses de que el Tribunal Oral en lo Criminal N°1 de Dolores dictara la sentencia del juicio a los ocho rugbiers culpables de asesinar a Fernando Báez Sosa, apareció la historia clínica del joven que podría cambiar drásticamente el rumbo de la causa.
Un electrocardiograma que no estaba anexado a la causa, cambiaría el lugar y el horario de la muerte del joven.
Fuentes de la causa aseguran que Tomei está muy molesto con la fiscalía porque considera que ocultó prueba favorable a la defensa durante tres años y entiende que los datos que ahí constan refutan la sentencia. Burlando, por su parte, destacó que el informe “estaba y el abogado no quiso incorporarlo”.
La sala de Casación que debe definir el futuro de la causa es la misma que en julio de 2020 rechazó por “inadmisible” un recurso de “habeas corpus” de la defensa, que solicitaba la excarcelación de los acusados por entender que sufrían una “arbitraria privación de la libertad”. Mientras tanto, los acusados continúan alojados en la Alcaidía del penal de Melchor Romero, en La Plata, a la espera de un posible traslado a una cárcel del Servicio Penitenciario Bonaerense.