En una treintena de distritos del interior de la provincia de Buenos Aires, intendentes del Frente de Todos sufrieron en las PASO resultados adversos para sus boletas locales. En Villa Gesell, es cierto que esa lista fue la más vota, pero la suma de los sufragios obtenidos en la interna de Juntos supera en votos a la del oficialismo. El riesgo de repetirse ese porcentaje entre los frentes en noviembre podría resonar en el Concejo Deliberante, donde la oposición podría quedarse con la mayoría camino a 2023.
Pareciera que el diagnóstico es: la nacionalización de la elección es el aspecto central que erosionó el esfuerzo local. Por eso, para este segundo tramo del año electoral, se concentran en poner valor la gestión local, con la cual llegaron a este 2021 con un respaldo superior al 60% obtenido en 2019.
El plan del Frente de Todos geselino parecería ser “empujar de abajo hacia arriba”. Ese Plan incluye mayor cercanía de la administración comunal con vecinos. Creen que, a diferencia de la campaña para las PASO, donde aún estaban activas algunas medidas restrictivas, en esta etapa pueden avanzar en una militancia casa por casa, padrón en mano y hablando con quienes no fueron a votar en septiembre.
Pareciera que Barrera entendió la necesidad de “cambiar el discurso”, dejar de aferrarse a la gestión de la pandemia y el programa de vacunación y enfrentar los temas económicos. Para eso enfocó la gestión de la obra pública y el turismo.
El hincapié en materia de infraestructura tuvo su correlato fuerte en el anuncio de un paquete de obras para los próximo dos años que beneficiará al sector comercial y turístico. También, durante la última semana, hubo anuncio de beneficio para el sector gastronómico. Fueron acciones complementadas con anuncio de licitación para la finalización de viviendas del Plan Federal y obras ya comenzadas que siguen avanzado. “Tenemos mucho para mostrar”, dijo un hombre de extrema confianza del intendente municipal.
En cuanto al esfuerzo comunal puertas para adentro, se avanzó recientemente en un acuerdo salarial con el gremio municipal que lleva el mínimo de bolsillo a $ 40.000 , sin contar horas extras y asignaciones familiares, sumando 100 pases a planta permanente antes de fin de año.
El humor social debido a las restricciones por la pandemia pesó con fuerza en las Primarias. Superada esa etapa y libres de restricciones, en el distrito ven que incide positivamente en lo anímico la reactivación de las actividades gastronómicas y en los espacios de recreación, alentados también por el turismo en los fines de semana y ni hablar en los feriados.
Quienes reportan en el FdT se vieron como la cara local de medidas antipáticas en tiempos de pandemia y fue el caso de Barrera. Ante eso, marcan que hay que enfrentar el cara a cara con el vecino admitiendo el complejo panorama, pero trabajando dos frentes: el pasado macrista reciente y los indicadores que “marcan que ya estamos por encima de 2019”.
“Es una elección que está muy nacionalizada, más de sellos que de candidatos. Ahí tenemos el problema”, analiza un armador del peronismo local que buscará revalorizar el mensaje al gobierno local y la importancia de tener un Concejo Deliberante que “colabore en la gestión”. Montarse a la campaña “mostrando hechos, escuchando y dando explicaciones”, es la fórmula para recuperar el electorado perdido en septiembre.