Una difícil situación se vivió el domingo por la noche, luego que uno de los cinco presos que estaba alojado en los calabozos de la comisaría de General Madariaga, se escapó del lugar. Sin embargo, tras una persecución a pie, el oficial Eduardo Asad logró recapturarlo.
De acuerdo al informe oficial, a las 22:40 del domingo, personal policial advirtió que el detenido Sebastián José Vilchez, imputado por robo agravado por el uso de arma y encubrimiento (a disposición del Juzgado de Garantías 6 de Dolores), se dio a la fuga por los fondos de la dependencia, previo a abrir los candados de la reja.
En consecuencia, el efectivo que estaba de guardia e imaginaria, Eduardo Asad, comenzó la persecución a pie, mientras el oficial de servicio se quedó en el lugar resguardando a los otros cuatro detenidos. A las pocas cuadras, Asad logró reducirlo en el interior de la vivienda del vecino Cristian Peñalba, a la cual había ingresado por la puerta delantera; todo culminó tras un forcejeó en el que el efectivo sufrió una herido de arma blanca en su brazo izquierdo, y Vilchez recibió dos impacto de bala en su muslo izquierdo, producto de disparos que realizó el policía con su arma reglamentaria.
Luego, se hizo presente personal de la cuadricula, que se encargó de resguardar el lugar y trasladar al detenido a la seccional, donde se solicitó la ambulancia encargada de llevar a los dos heridos al Hospital. Allí se comprobó que las lesiones de Vilches y Asad no revestían gravedad.
En cuanto a las acciones posteriores, arribó también la policía científica, personal de la SUBDDI local y componentes de la Ayudantía Fiscal. Se decidió la incautación del arma reglamentaria de Asad, mientras que el detenido permanece alojado en el Hospital, bajo custodia de efectivos de la dependencia local y del grupo GAD.
Por otra parte se supo que una vez recuperado de sus dolencias, el detenido será trasladado a otra dependencia, donde seguirá cumpliendo la condena por los cargos antes mencionados.
Consultado al respecto, el comisario Carlos Vara le dijo a EL MENSAJERO que “fue un inconveniente muy complejo, gracias a Dios el efectivo está bien, y quiero destacar que se desenvolvió de manera excelente, actuó cumpliendo su función como corresponde. Corrió varias cuadras a pie, puso en riesgo su vida, y finalmente cumplió el cometido de recapturar a este preso”.
También dijo que “nosotros tenemos capacidad para cuatro detenidos y hoy por hoy tenemos cinco, aunque en otros momentos hubo hasta 9 presos, es decir más del doble de la capacidad. Esto obviamente nos trae inconvenientes, pero es una cuestión estructural que nos excede, porque las unidades carcelarias no tienen cupo y entonces hay que esperar hasta que tengan para que la división traslado los lleve allí. Sin dudas es algo que nos genera inconvenientes”.
