El hecho recordado por esta investigacion ocurrió a finales de la década del ‘90, cuando cientos de caribeñas fueron víctimas de proxenetas que les quitaban su pasaporte y las prostituían. Un grupo de ellas fueron explotadas en General Madariaga en el cabaret que regenteaba “la Tía Mary”. La historia contada por los jovenes, habla del ardid para que la policía no las detuviera por ser indocumentaldas y la bizarra boda que tuvo a la “madama” como madrina.
La Tía Mary –cuyo nombre era María Killamet— regenteaba el archiconocido cabaret ubicado en Carlos Pellegrini y calle 2, que no fue el único, ya que a lo largo del tiempo existieron varios como Plumas Verdes, Las Vegas, Momentos, Marionetas...
Transcurridos los años por propia iniciativa y curiosidad, los alumnos de la Escuela de Educación Secundaria N° 5 de General Madariaga le plantearon a la docente Sheila Acosta Anzalone realizar un informe respecto al funcionamiento de los cabarets y recorrieron y fotografiaron cada uno de ellos en compañía y asesorados por su profesora. Algunos abandonados y entre ruinas como Momentos, luego Marionetas... Otro convertido en taller de autos como el de Mario Gómez, quien saludó amable cuando recibió a los estudiantes e invitó a recorrer el local que supo ser un tugurio para explotación de mujeres.
