Ambos habían pasado por la linea de caja y pagaron por algunos productos que tenían en un carro pero al salir un empleado de seguridad se dio cuenta que había algo más: un buzo que llevaba el hombre era un modelo que se vende allí, lo tenía colocado el hombre de 61 años y al instante se dio cuenta que debajo de las ropas había más cosas.
Cuando llegó el personal policial se dedidaron a revisarlo a el y a su acompñañante de 33 años y les encontraron: un Whisky, una botella de vino, aceite de oliva, barras de cereales, un torp deportivo, un sueter, una manta para bebé, varios cepillos de dientes y pasta dental.
Fuente: centraldenoticiasmadariaga