Cuando se le preguntó sobre los precios en Villa Gesell, lugar en donde estaba el ex diputado, dijo que los mismos están “muy altos. Un té 45 pesos por ejemplo. En Buenos Aires me quejaba por un café a 20 o 25 pesos, y acá un té vale 40 a 45 pesos. Es un verdadero abuso, y ahí es en donde tienen que intervenir el Estado para controlar”.
“No puede ser que los formadores de precios hagan lo que quieran. Hay 28 grupos económicos que hacen lo que quieren, y es ahí en donde hay que controlar”, dijo en relación al funcionamiento de los precios en general.
“Diciembre nos dio un aumento de 4.69 por ciento, y es importantísimo. La inmensa mayoría de los países de la tierra no tienen en un año este aumento que nosotros tenemos en un mes. La primera quincena de enero 3.75 por ciento….en quince días es un verdadero abuso. Es ahí en donde el Estado tiene que intervenir decididamente”, sostuvo.