Los usuarios dicen que desde el jueves, en casi todas las agencias de quiniela de la ciudad, les dicen que “no hay sistema” para recargar las tarjetas para el uso del servicio de transporte público. También desde estos comercios, que son los únicos habilitados para hacer las transacciones, se les informó que no poseen las tarjetas Sube para vender.
Ante esta situación, MinutoG salió a constatar que pasa con el servicio, esencial para los turistas y trabajadores. El equipo periodístico hizo la recorrida el domingo al mediodía. El primer dato para tener en cuenta es que casi la totalidad de las agencias de quiniela se encontraban cerradas. Solo una agencia de las que se encuentran en la avenida 3 –desde 140 a Buenos Aires- estaba abierta. Se trata de La Galera, ubicada a la altura del paseo 118. Ahí se explicó que el principal motivo de tener las puertas abiertas, es la atención de los pasajeros del colectivo, ya que no hay otro lugar que cargue los días domingo. Consultados sobre la “falta de sistema” en los últimos días, negaron que eso allá pasado y señalaron que se trata de una escusa que usan algunos agencieros para no cargar las tarjetas, ya que eso no le deja ganancia al comerciante y al mismo tiempo le crea una gran responsabilidad por la fuerte recaudación que genera. Aunque en la única agencia que carga las tarjetas Sube no piensan dejar de prestar el servicio, no mucho menos cobrar un recargo, si dan a conocer su miedo ya que no tienen presencia policial en la zona, a pesar de tener una recaudación que las autoridades de seguridad deberían tener en cuenta.
En la terminal la situación es similar. La empresa El Ultimo Querandi no tendría tarjetas para vender y las cargas, en algunos momentos del día, se ven interrumpidas, aunque no queda claro si realmente el “sistema está caído”. La alternativa que presentan algunos colectivos del 504es que el colectivero pasa su tarjeta Sube y vende el pasaje al usuario que no pudo cargar la misma.
Asi, en este contexto, no faltan las avivadas. Algunos agencieros de quiniela, cuando “tienen sistema” cobran adicionales a las recargas. Algo que está prohibido. Una madre con su hijo en brazos le contó al equipo periodístico de MinutoG, que hace algunos domingos atrás, en una agencia de la zona céntrica le cobraron 7 pesos de recargo.
Sean cual sean los motivos de por qué no funciona el sistema con normalidad, lo cierto es que se ven afectados miles de usuarios por dia, entre ellos trabajadores y turistas. La imagen de la funcionalidad de la ciudad tambien se ve manchada, por esta situacion que aunque parezca menor, no lo és.