El día 25 de julio, siendo aproximadamente las 16.30 hs. Concurrí a atender la juguetería de nuestra familia sita en el Paseo Estación de las Pampas. Al llegar me encuentro con Daniel Hernández, quien fue la pareja de Cynthia Filippone, al día de su asesinato, por primera vez en mucho tiempo esta persona concurrió a atender su local ubicado frente al nuestro. Daniel Hernández jamás hizo algo para aclarar el caso del asesinato de mi hermana y dejó a la familia de ella sin apoyo de su parte, ya sea económico, o simplemente el mas esperable, el de ayudar a que el caso se esclarezca. El año pasado, su hijo Simón Hernández tuvo un pedido de eximición de Prisión, Simón es esquizofrénico y no hace nada sin el consentimiento de su padre. Hoy Simón Hernández está imputado y su padre muy sospechado de ser encubridor. Al verlo, me descontrolé emocionalmente y lo insulté, compañeros del paseo me aconsejaron retirarme, cosa que hice.
Luego de este episodio, escribí en el facebook cerrado del paseo que no quería discutir con los dueños del mismo, y que al no poder dominar mis emociones les dije que si ellos me lo pedían mi juguetería se retiraría. Hoy me dijeron que estaban de acuerdo con que nosotros nos vayamos. Con esta resolución mi familia se queda sin el sostén económico necesario para subsistir.
La lucha de mi familia comenzó el 5 de mayo de 2014 y durante todo este tiempo aprendí que es muy difícil encontrar gente que conozca la palabra DIGNIDAD, pero mucha que conoce la palabra HIPOCRESÍA.