Los jovenes y Adolescentes disfrutaron de una jornada repleta de juegos, música en vivo, mates compartidos, comida y una profunda reflexión final. Este espacio no solo permitió fortalecer los lazos entre las congregaciones, sino también renovar el compromiso de trabajo conjunto.
Uno de los organizadores, Jeremías Czarny, destacó la importancia de la unidad: “Este fogón es el resultado del trabajo en conjunto que venimos realizando con los líderes de cada congregación. Y es el primer paso de todo lo que se viene para el 2025”, afirmó con entusiasmo.
Este fogón simbolizó el poder del trabajo en equipo junto con la motivación que ofrece la fe para fomentar vínculos sólidos, inspirando a todos los presentes a encarar con esperanza y determinación los proyectos y sueños del 2025.