Los empresarios hoteleros de Villa Gesell experimentan una marcada inquietud ante la proximidad de la temporada de verano. A diferencia de años anteriores, los niveles de reserva revelan una disminución significativa, generando interrogantes sobre el impacto directo de la crisis económica que atraviesa el país.
"Es la primera vez que para enero apenas tengo reservas del 30% para esta fecha", indica Carlos propietario de una hostería de barrio norte.
La incertidumbre generada tras los anuncios económicos de la nueva gestión nacional para paliar la crisis económica ha permeado en las decisiones de los potenciales turistas, quienes muestran cautela al momento de planificar sus vacaciones.
"La verdad para febrero todaía no tengo ni siquiera consultas", dice un propietario de un hotel del centro.
El temor a un verano con niveles de ocupación por debajo de lo esperado ha llevado a los empresarios a buscar estrategias para incentivar la demanda, como promociones especiales y descuentos. Sin embargo, reconocen que la incertidumbre económica persistente dificulta la proyección de resultados positivos.
