El San Jorge I tenía 20 metros de eslora y, de a poco, especialistas de la Armada y de Prefectura se están abriendo camino por la timonera , el castillaje, y camarotes. Falta el acceso a la sala de máquinas donde han encontrado trabas para abrir la puerta, por lo que posiblemente se recurra a un soplete para su apertura. Los supervivientes están a la espera de declarar en el Juzgado de Dolores, puesto que están en tratamiento psiquiátrico.