Ante una fuerte presencial policial, que incluyó al Secretario de Seguridad, el Director del àrea, el jefe de la policía comunal, efectivos del GAD y agentes, un grupo de vecinos se presentó en la puerta del municipio para pedir la renuncia del arquitecto Gerardo Galli.
La iniciativa surgió ayer después de conocerse en la sesión del Concejo Deliberante, la denuncia realizada por Luis Baldo, sobre una operación inmobiliaria realizada por Galli en un remate de 55 hectáreas que, si el Código de Ordenamiento Urbano no hubiese sido desestimado por el HCD, lo convertiría en el dueño de tierras muy valiosas con usos diversos.
Entre ambientalistas y vecinos en general, la candidata a Intendente del Frente de Izquierda Unidad, sostuvieron el pedido y carteles para que el Intendente saque del cargo al arquitecto que confeccionó el Plan de Ordenamiento Territorial a su medida y la del mercado.