La concejal Eva Ayala, de Acción Marplatense, respaldó las declaraciones del intendente de Villa Gesell, Gustavo Barrera, sobre las amenazas que sufre el turismo interno, condenó las respuestas del bloque oficialista local y arremetió contra el intendente Guillermo Montenegro, que a su entender hace “campaña para irse”.

 

“El intendente de Villa Gesell formuló una advertencia responsable sobre el horizonte de amenazas que enfrentan el trabajo y la inversión turísticas. Están basadas en datos y evidencias concretas de la realidad: el dólar planchado llena de argentinos los países limítrofes y a los sectores medios no les alcanza la plata para venir y gastar a la costa Atlántica”, dijo Ayala.

 

“Desde Mar del Plata, los concejales de Montenegro salieron a ladrar los eslóganes y falacias que tienen por costumbre en lugar de ocuparse de interpretar bien la realidad para defender mejor los intereses de los marplatenses. Criticaron al intendente Barrera. pero no refutaron los argumentos”, agregó.

 

Según Ayala, “el balance turístico arroja un déficit creciente y pavoroso con los destinos del exterior”. Sostuvo que “el modelo económico libertario, tal como lo hacían Martinez de Hoz y Cavallo, es celebrado en Chile, Brasil y Miami”, pero “los trabajadores y trabajadoras del sector turístico y las pequeñas, medianas y grandes empresas del turismo local lo están sufriendo”.

 

En una entrevista con LA CAPITAL publicada el lunes, Barrera consideró “muy preocupante” la situación del turismo. “No podemos competir con los destinos del exterior”, afirmó, y advirtió: “Si esto sigue así, la próxima temporada va a ser caótica”.

 

Concejales oficialistas lo cruzaron. “Prueben con gestionar de forma moderna, pensando nuevas alternativas. En Mar del Plata esto funciona y así lo reflejan los números. Por ende, su problema no es más que un problema de gestión”, lanzó el jefe del bloque, Agustín Neme (PRO). “¿Por qué no prueban con gestión y un plan de trabajo a largo plazo, kukas?”, se plegó su compañera de bloque Florencia Ranellucci.

 

Ayala se sumó a la controversia con críticas a los concejales: “Lamentablemente prefieren negar antes que analizar. Descalificar antes que asumir la responsabilidad de reclamar los cambios que necesita la política económica para defender el trabajo marplatense y de toda la Costa Atlántica. Una obtusa ceguera ideológica les impide ver la realidad, al mismo tiempo que un espíritu soberbio los impulsa por lo general al agravio”.

 

A su juicio, “merece un párrafo aparte la referencia al supuesto ‘modelo de gestión’ de Montenegro” porque “no hay ningún modelo ni hay gestión: Montenegro está en campaña para irse, no está trabajando para mejorar la vida de los marplatenses”.

 

Ayala afirmó que, si a Montenegro “le ofrecen un ministerio, le va a tirar la Municipalidad por la cabeza al primero que se cruce y, si no encuentra una salida decorosa, es capaz de irse hasta sin decoro”.

 

“No les importa Mar del Plata, no trabajan por la ciudad y el protagonismo que pretenden no es por la fuerza de los hechos, sino por las bravatas de sus peleas de vuelo bajo”, añadió.