Hoy miércoles por la mañana, la fiscal Verónica Zamboni se aprestaba a indagar al capataz y los cuatro albañiles del Apart Hotel Dubrovnik, que se derrumbó ayer poco después de la medianoche.
Tras formalizar sus detenciones, la fiscal -que en 2020 envió a juicio a los rugbiers acusados de matar a Fernando Báez Sosa- los acusó del delito de estrago culposo agravado por la muerte de Federico Ciocchini, un jubilado de 84 años oriundo de Balcarce, la única víctima fatal encontrada hasta el momento. Podrán enfrentar hasta cinco años de cárcel si son considerados culpables.
En paralelo, los dueños del hotel ya se presentaron en la fiscalía de Zamboni con un abogado, confirmaron fuentes judiciales a Infobae. Todavía no fueron acusados formalmente. El capataz y los albañiles, que fueron arrestados mientras huían del derrumbe, no son los únicos investigados.