El gobernador del provincia de Buenos Aires, Daniel Scioli, arribó a Villa Gesell en helicóptero alrededor de las 13 horas. Aterrizó en la cancha de San Lorenzo. Luego, de allí se dirigió a la nueva sede de Envión (programa que impulsa desde su gobierno). Luego de recorrer esas instalaciones, el mandamás provincial –junto a una comitiva municipal encabezada por el intendente- concurrió a la inauguración de la Comisaria de la mujer. En el edificio de paseo 110 y avenida 8 esperaba un grupo de vecinos. Algunos con petitorios y otros con remeras y gorras que rezaban la frase “Ola Naranja-Scioli 2015”. Al llegar a ese lugar, el gobernador convocó al ministro de Seguridad, Alejandro Granados, para cortar la cinta junto al intendente.
Luego de pasar al baño de la comisaria, Scioli descubrió una placa en una pared de la comisaria y partió con rumbo al Polideportivo donde se llevaba a cabo la Paella de la amistad. En esos 100 metros que dividen ambos lugares, el gobernador caminó, tuvo un breve contacto algunos vecinos de las localidades del sur -que le entregaron un petitorio por el tema seguridad- dialogó con la prensa y recibió el saludo a los gritos de personas que estaban en las tribunas del estadio de Atlético. Al entrar al predio, donde se cocinaba la paella, Scioli saludo a algunos presentes, probó la comida y hasta se animó a cocinar.
Sobre el final de su visita habló por los altoparlantes, saludando a todos y contando la razón de su visita (la inauguración y la entrega de diez patrulleros). Luego de eso, partió raudamente a un auto que lo depositó en el helicóptero que lo llevaba a seguir recorriendo ciudades vecinas.