Por: Jorgelina Mena
Una vecina de Mar Azul, Carla Mena, integrante del grupo organizador de la Colecta por Mar Azul e integrante de la agrupación de vecinos Somos Uno Mar Azul apenas vio la publicación se puso en comunicación con la dueña del aviso, Gabriela Peper.
El odontólogo Peper trabajaba en dos consultorios, en uno de su ciudad y en otro de Pinamar. Hace tres años, una noche volviendo de Pinamar hacia Madariaga, tuvo un accidente de tránsito que le costó la vida. Un tiempo después su hija intentó donar sin suerte los aparatos. El equipamiento es antiguo pero funciona. Gastón Pocai, odontólogo de Mar de las Pampas al ver las fotos comento: "Mientras haya lugar para sentarse y una luz para mirar está bien. Son equipos de fierro no se rompen nunca, no son lindos estéticamente pero sirven y andan bien".
El Centro de Salud de Mar Azul cuenta con atención odontológica pero no posee consultorio para tal fin. Había un consultorio que un par de años atrás se iba a preparar para montar el espacio que el doctor Roberto Cardozo necesitaba para poder reaizar de manera integral la atención de sus pacientes.
Pero con la puesta en marcha de la guardia de emergencias del CAPS hace ya poco más de un año y medio, ese consultorio pasó a ocuparse como dormitorio para el personal de la guardia: chofer de ambulancia y enfermero/a.
Muchos fueron los pedidos de los vecinos para que esa situación provisoria tuviese una solución adecuada para el personal de la guardia y también para que de una vez por todas el consultorio odontológico pudiese ser una realidad y dejara de ser un proyecto.
Recién en diciembre pasado, el municipio dio comienzo a la ampliación del Centro de Salud para darle a la guardia un espacio individual. Cuando la guardia tenga su propio nuevo espacio, el consultorio que se liberará pasará a ser el lugar de trabajo que tanto la comunidad como el odontólogo necesitan.
Carla Mena y Gabriela Peper estuvieron en contacto durante todo el fin de semana para poder concretar el retiro del equipamiento sin falta hoy lunes. ¿Por qué el apuro? Gabriela lo detalla brevemente: " Publiqué dos equipamientos que eran de mi padre durante dos años y medio y nunca se concretaron los retiros por parte de los interesados, uno de ellos casualmente era de Mar Azul. Se contactaron de Pinamar, Las Toninas y de acá de Madariaga pero no avanzaron. Esta vez fui terminante y no reservé nada".
Pero por esas cosas de la vida... lo que no sucedió en dos años y medio, ocurrió en dos días. Y el gran empuje de Carla desencadenó pequeñas contribuciones que hicieron de este episodio un gran gesto de solidaridad común.
Se consiguió flete y había que conseguir espacio para guardarlo ya que en el Caps de Mar Azul no hay espacio físico para albergar un sillón, un esterilizador, una salivera con brazo, luz y bandeja y un mueble para guardado de elementos.
Y ahí es donde vecinos comprometidos de los pueblos del sur de Villa Gesell resolvieron en una hora que todo quede guardado en un lugar seguro hasta que el consultorio esté en condiciones de ser equipado.
"A mí me basta con que el equipo se utilice. Tiene un valor emocional muy importante para mi familia", confesó Gabriela Peper.
Mañana martes el segundo equipo donado tendrá otro destino... Coronel Vidal. La labor del odontólogo Peper, uno de los primeros en dar esa atención en General Madariaga, tendrá una especie de homenaje con este círculo que se cerró después de tanto tiempo.
Los vecinos, una vez más, dan el ejemplo y demuestran que cuando la necesidad y la voluntad se encuentran los logros son posibles.
