Los choferes de El Último Querandi, junto con afiliados de la UTA llegados de Mar del Plata, irrumpieron en las inmediaciones del municipio pasado el mediodía. Con bombos, redoblantes, bombas de estruendo y canticos, cortaron el transito y reclamaron al municipio soluciones a la crisis del sector.
La manifestación de la UTA fue recibida por una fuerte custodia policial, que blindó el frente del palacio municipal. Al mismo, el intendente ordenó evacuar el edificio, por lo que contribuyentes y empleados se retiraron y las puertas se cerraron.
Durante la manifestación no hubo hechos de violencia, ni se registraron daños. Solo un reclamo ruidoso que si afectó el transito y que finalmente logró que el intendente reciba a los representantes de la UTA.